Amarse hasta que la muerte los separe fue lo que prometieron el sábado a las 19:45 de la tarde mi hermanito Setlord y su novia Paola, mi cuñadita...

El matrimonio estuvo súper, y sobre todo porque conocí gente linda, (aunque ya los conocía en el ciberespacio, sí, a ustedes me refiero....) y me sentí feliz. Feliz y emocionada por el matrimonio de una de las mejores personas que he conocido en este mundo, feliz por la novia que se veía radiante y enamorada, feliz por ese hijo/a, mi sobrino/a que está en el vientre de su madre... Feliz por la emoción que rodeaba a esta pareja, por ver a todas las personas emocionadas, alegres y deseándoles lo mejor a ellos desde cada uno de sus corazones...

Ahhh, ya me voy a poner a llorar de nuevo...

Después de reírnos mucho, y acompañar a los novios me fui a mi casa, y conversando por el camino, y luego analizándolo después, me di cuenta una vez no me la jugué por completo por un amor, y ahora pienso que fue la mejor decisión (¡ay! si yo les contara cómo fué esa desdichada relación!!!)(bueno, hay algunos que lo saben!!) me di cuenta de que para amar se necesitan dos... ustedes dirán GRAN DESCUBRIMIENTO!!, pero es cierto, para amar se necesitan dos personas con el mismo grado de compromiso, con las mismas creencias, pero sobre todo con las mismas expectativas de vida y desarrollo en pareja...

Yo no me podría imaginar con un hombre que quisiera tenerme encerrada en la casa, vestida con ropa gigante y sin hablar con nadie para que no se pusiera celoso y más encima cuidando niños y sin hacer nada más!! (ojo, no estoy desmereciendo el trabajo de las dueñas de casa, que por lo demás harto que trabajan!! si no, pregúntenle a mi madre!!), pero me refiero a ese tipo de maridos que no dejan que sus esposas trabajen.... yo soy una profesional, trabajo desde que salí del colegio, tengo aspiraciones, tengo proyectos, quería comenzar a estudiar en la universidad y lo estoy logrando!! pero para eso tuve que romper una relación que en algún minuto pensé de verdad que sería para toda la vida...

Ahora estoy bien, con un proyecto de carrera, con mi trabajo, con mi familia (el haber elegido el otro camino me hubiese significado además separarme físicamente por miles de kilómetros de mi familia y no estar al lado de mi abuela cuando falleció...)

Creo que tomé la mejor decisión, aunque hay quienes dicen que sueno demasiado dura cuando digo que necesito espacio para desarrollarme y un hombre a mi lado con visión de futuro... suena egoísta, lo sé, pero la experiencia me comprobó que careciendo de esas dos cosas no es posible, al menos para mí, construir una relación sana y en la que yo no me sienta un parásito del otro, sino una mujer independiente, inteligente y valorada por su pareja.... Es mucho pedir???

Quizá suena duro, porque a fuerza de analizarlo y de convencerme a mi misma de que mi espacio también es importante esas cosas ya no duelen, pero ahora al revivirlas sola, sin mirarte a la cara, me hacen caer un par de lágrimas desde los ojos...

Lo importante es ver a mi hermanito y su esposa felices, plenos, dichosos y orgullosos de ser padres... ya que después de mucho sufrir y equivocarse en la vida, hoy, mejor dicho el sábado sellaron un compromiso de amor que espero el Señor fortalezca y fructifique para cada uno de ellos, y para la nueva familia que ahora tienen.

Sorry a todos por lo sentimental... los días lluviosos me hacen mal, y me aumentan las ganas de tener un cuerpo masculino al cual abrazarme y en el cual sentirme acogida, no sólo simbólicamente sino sentirme contenida en él tanto en mis días tristes como compartiendo la felicidad por ejemplo de estar en ese lugar tan especial el día sábado...

FELICIDADES HERMANITO!!!, FELICIDADES CUÑADITA!!!, QUE EL AMOR QUE SE TIENEN PERDURE POR SIEMPRE....